10.8.16

Máquinas y arena....




Máquinas y arena, se cruzan constantes en una lucha interminable por abarcar el territorio. La duna se impone, mientras el hombre se empeña en llevar la contraria a la naturaleza, con su maquinaria artificial. Ella dormía tranquila y se desplazaba al son del baile que le brindaba el levante, sin embargo el hombre insistía en su empeño de dominarla, poseerla, hacer de ella lo que le viniese en gana. Años después, la duna sigue su curso normal y anteponiéndose a todo, sobrepasa la insistencia de la excavadora, que le arranca trozos y la deshace. Ella con la ayuda del viento, vuelve a unirse, se escapa de sus garras y continúa su huida. Los hombres creen que pueden vencerla, sin embargo la duna manejada por las mareas del Dios Eolo continúa avanzando implacable. Se ríe de las artimañas para hacerla retroceder. Engulle en su camino a los frondosos pinos, y planea marcharse de Valdevaqueros, para existir en otro lugar con infinitos cielos poblados de nubes y que otras aguas inunden sus sueños.

El agua sobre él...

Cabo Verde, África El agua sobre él... Se ungía, cual venerado líquido que resbalaba sobre la piel curtida por el sol y el viento....